Siempre se ha dicho que las comparaciones son odiosas, sobre todo cuando se compara a dos hermanos, es más común de lo que imaginas oír a los padres o a los abuelos decir eso de “pues tu hermano a tu edad ya hacia esto o lo otro o lo de más allá” y eso da mucha rabia, os lo digo por experiencia propia. Una comparativa muy cruel cuando tiene que ver con los logros y los meritos personales y profesionales de una persona. Y mucha más rabia da, cuando es verdad.
Comparar cosas está bien cuando vamos a obtener un beneficio de ello, por ejemplo, si comparamos tiendas en las que comprar más barato, yo siempre compro el material de oficina en https://www.mercamaterial.es/ por que no tiene competencia. La verdad es que muchas veces las comparaciones son necesarias para darnos cuenta de que es lo mejor.
Nos vamos de vacaciones a un camping un año, y al siguiente vamos a otro, los dos nos cuestan lo mismo, es entonces cuando hacemos una comparativa para saber en cuál de los dos hemos estado más a gusto, en cual se lo han pasado mejor los niños, cual era más aseado, y en cual hemos pasado mejores momentos. Estas comparativas son ideales cuando queremos saber qué es lo mejor sin que interfiera en la decisión el precio.
Las comparativas en cuanto a precios, está claro que antes de hacer una compra importante, comparamos precios en varios sitios, así, procuramos comprar el mismo producto por el menor importe. Comparar dos fotografías para saber cómo ha pasado el tiempo por nosotros, si vemos una foto de hace diez años y una reciente, será muy fácil comparar la ropa que llevábamos entonces o el corte de pelo con el que llevamos ahora.
Comparar está bien siempre que no perjudique a nadie, las comparaciones en el trabajo son atroces, nada peor que te comparen con un compañero de trabajo que ya no está, y sobre todo si tu estas en su lugar, que te digan “fulanito lo hacía así” es lo peor que te puede pasar, estas comparativas no se usan para ayudar ni para sacar un beneficio, son para que tengas claro que esa es la manera errónea de hacer lo que estás haciendo, y es la manera sutil de decirte como debes de hacerlo. Procura no hacer comparaciones que puedan afectar a los demás.