Algo de lo que no cabe duda es que el tipo de trabajo SEO está teniendo cada vez más un lenguaje tan propio del oficio que para cualquiera que sea ajeno a este sonara como algo totalmente incomprensible.
Lo asombroso del asunto es que sin excepción al usar la internet cada uno de nosotros interactúa sin darse cuenta con este tipo de lenguaje. Y es que lo cierto es que cosas como el noindex y el nofollow son manejados cada día por todos, en el sentido de que entramos en contacto con información contenida bajo este tipo de acciones.
¿Pero de qué se trata el Whitehat? Pues bien, ese es el término que se le da en el mundo del posicionamiento SEO a todas aquellas acciones dirigidas a lograr el posicionamiento web de manera legal, atenidos a lo que Google establece como la manera limpia de lograr poner en el top ranking a una página.
Pues bien, en este sentido tanto la acción como los que la ejecutan reciben el nombre de Whitehat. Y por supuesto no son muchos los que se atienen a este; aquí es necesario revelar un secreto que si bien es oscuro no es ningún misterio para la mayoría en el mundo del posicionamiento.
Y es que la mayoría hace trampa o se sale del curso de acción legal a la hora de lograr posicionar un sitio en la internet. Es así como por ejemplo los links que se auto ejecutan de forma oculta y otras triquiñuelas unas más nocivas que otras llenan la red actualmente.
¿Qué resultados trae ser un Whitehat?
Ser alguien catalogado de esta manera tiene sus pros y sus contras para la página web. En primer lugar, lo positivo radica en que esta no corre riesgo de ser cerrada o penalizada por Google, lo que es un plus bastante atractivo que por supuesto va en detrimento del factor tiempo.
Posicionar una página por el método Whitehat demora cuando menos un año y siempre va a depender estrechamente del volumen de competencia que haya alrededor.